Cuando uno comienza unas vacaciones, debe saber que existen algunos pequeños detalles que pueden hacer que las mismas sean buenas, o que sean realmente espectaculares. La cuestión es que para ello debemos estar atentos a absolutamente todos los indicios que puedan llegar a condicionar nuestra estancia en el lugar elegido.

Por ejemplo, si buscamos un destino alejado del resto del mundo, en el que realmente podamos descansar y disfrutar de algunas de las mejores playas del planeta, entonces la Isla Mauricio es una opción espectacular, ya que posee hoteles de los más lujosos, con circuitos de spa, masajes, y todo lo necesario para olvidar la rutina.

Ahora bien, si concurrimos en pleno verano local a este destino, es decir, entre los meses de diciembre y febrero, notaremos que prácticamente no corre ningún tipo de viento en toda la isla, lo cual es una ventaja para aquellas personas que rápido se sienten molestas por este factor, el cual en la playa, es entendible, puede llegar a condicionarnos.

Por este motivo, también es importante que consideres siempre que si piensas acudir a la Isla Mauricio en invierno, te desplaces hacia la parte oeste de la misma, ya que entre junio y agosto los vientos son realmente fuertes, pero llegan desde el este, donde más impactan, y ya arriban con menor tenacidad al oeste.

Vía: Isla Mauricio
Imagen: Isla Mauricio