Las maravillas de las islas Mauricio, generalmente se encuentran vinculadas a los aportes de la naturaleza. Si bien se trata de un destino de lujo que cautiva a miles de turistas a disfrutar de sus bellísimos hoteles, la naturaleza aun sigue siendo la mayor protagonista y razón para que los viajeros elijan este destino.
En este sentido, presentamos a una de las obras naturales más impresionantes del archipiélago, la Roca que llora. Se trata de una increíble curiosidad de la naturaleza, para quienes sepan apreciar la inmensidad de esta a la hora de crear paisajes fabulosos.
De esta manera, debido a la intensidad con la que el mar choca con sus fuertes olas, las rocas van adquiriendo diferentes formas y creando nuevos efectos; y el llanto es uno de ellos. Pues al romper las olas con el acantilado, da la impresión de que alguien llora cuando cae el agua del mar.
Por otro lado, es interesante destacar que se trata de un sitio muy querido y visitado por los lugareños, los cuales además, aseguran que estas formaciones muestran el perfil esculpido por la naturaleza de uno de los poetas mauricianos más importantes, Robert Edwart Hart.
De este modo, prestando atención y buscando las formas que la intensidad y volumen del agua le han otorgado a las rocas, será posible encontrar diferentes tipos de figuras entre las formas retorcidas y redondeadas.